miércoles, 31 de octubre de 2018

Hoy


Duele ver lo querido
Pero duele más
ver lo no querido

Ser y ver será la eterna pregunta
Que no tendrá respuesta
En aquellos ojos divinos
Encerrados en el miedo de ver
con el corazón, pues prefiere ver
con una falsa razón.

Necesitarás solo un simple corazón
Para redimirte y perdonarte,
Lástima que lo hayas perdido

Te conozco, pero ya no conoceré más
Te has condenado ya no con una inicial
sino con tu propio nombre.  

sábado, 20 de octubre de 2018

El Asterion de Borges y el Amor.

El amor en la casa de Asterion es cada puerta,
que por cierto, son infinitas de número,
y en aquellas infinitas posibilidades
Yo, el Asterion, quedaré solo
esperando a quien desangrar o quien me desangre
en aquel ojalá de mi amor molesto

A veces juego a querer y otras no pocas veces
juego a que me quieran, donde yo, el Asterion,
siempre ha quedado solo en la espera de un visitante.

Hay azoteas, en mi casa, infinitas como las puertas,
que me llevan a profundas soledades como
aquella soledad de besos que no se dieron,  
labios que no se juntaron,
ni manos que se tomaron.

Ojalá y ya no te moleste mi amor, 
y que un buen dios me redima,
ya sea un toro o ya sea como yo, 
pero si es como yo tendrá problemas.

Tendrá que redimirme mediante la historia de plata
desvainada en mi corazón

lunes, 18 de junio de 2018

Si supieras que tan solo de pensarte 
ya me haces crecer como hombre de bien

¿Eres tú?

Dios quiera que si.






domingo, 20 de mayo de 2018

Tan solo unas palabras


Espero a cronos para poder mirarte.
Espero que el tiempo descienda del cielo para alcanzar la belleza de tu ocaso.
En aquellos hermosos cabellos se desprende la ternura de tu mirada.
Y la existencia de tu alma como el velo del cielo
hace amanecer en mi interior pura esperanza,
y decir: aún hay verdaderas mujeres de Dios.

viernes, 20 de abril de 2018

A la soledad


Cuando te vi, por primera vez,
ni conciencia de mí mismo tenia.
Y ahora que vuelvo a verte,
con una simple mirada,
inesperada,
aún vives en mí.

Serás como aquellas musas griegas
que te apoderas del alma ensangrentada
para crear poesía

Ahora que puedo verte
ni lo trato si quiera…

Aguardo como aquel primer hombre que se sintió sólo
y levantando su mirada contemplaba su esperanza.